En un contexto de crisis económica y derrota política de la dictadura en el plebiscito de 1980, el movimiento estudiantil, los gremios y sindicatos, las cooperativas de vivienda y otras organizaciones sociales comenzaron a reorganizarse.

En 1981 se promulgó la ley 15137 que autorizaba la creación de asociaciones profesionales. Esto impulsó los intentos de organización y alentó a toda una nueva generación. Durante 1982 se incrementó la organización sobre la base de esta ley y se tomó la iniciativa para realizar el acto del 1.° de mayo de 1983.

Con esos cambios, el movimiento sindical creció más que otros actores políticos y sociales. Los antiguos dirigentes de la CNT estaban presos o en el exilio; por lo tanto, un nuevo grupo de jóvenes reorganizaron el movimiento sindical, que adoptó el nombre de Plenario Intersindical de Trabajadores (PIT).

El movimiento estudiantil contó con una nueva generación de jóvenes que también empezaron a reconstruir la Federación de Estudiantes Universitarios del Uruguay (FEUU). Al mismo tiempo se comenzaron a hacer encuentros académicos, asados y bailes para promocionar la integración de los estudiantes. En 1982 todos estos esfuerzos tuvieron como resultado la formación de la Asociación Social y Cultural de Estudiantes de la Enseñanza Pública (ASCEEP).

El PIT, la ASCEEP, la Federación Uruguaya de Cooperativas de Vivienda por Ayuda Mutua (FUCVAM) y el Servicio Paz y Justicia Uruguay (SERPAJ) desarrollaron una activa campaña contra la dictadura militar. La convocatoria al acto del 1.° de Mayo, los paros parciales, la Semana del Estudiante, el paro cívico nacional, el Acto del Obelisco, los caceroleos y los apagones de protesta fueron algunas de las manifestaciones populares que se realizaron cuando los militares todavía estaban en el poder.