La Santa Alianza 1815 / Europa
Luego de la derrota de Napoleón Bonaparte, los reyes europeos que habían sido desplazados por él recuperaron sus tronos. Para evitar nuevas revoluciones y movimientos que volvieran a arrebatarles el poder, algunos de estos reyes hicieron acuerdos entre sí. Uno de estos fue la Santa Alianza, un tratado según el cual Austria, Rusia y Prusia se unieron en torno a las ideas religiosas que tenían en común para enfrentar juntos las amenazas que pudieran desestabilizar sus gobiernos monárquicos.
Las naciones que integraron la Santa Alianza se comprometieron no solo a defender el sistema de gobierno monárquico, sino también las creencias religiosas cristianas que tan duramente habían sido atacadas durante la Revolución francesa. En Francia, durante la revolución y el posterior gobierno de Napoleón, no solo la política había sufrido grandes transformaciones; la cultura, la sociedad y la religión también habían cambiado. El movimiento posterior a la caída de Napoleón se llamó la Restauración porque su idea era recomponer todo al punto anterior a la Revolución francesa.
Pero la Santa Alianza no se limitaba a la defensa del cristianismo. Su objetivo político era detener el avance de las ideas revolucionarias en Europa. Los monarcas de Austria, Rusia y Prusia entendían que los suyos eran los únicos gobiernos legítimos, pues eran los descendientes de las familias que habían gobernado durante siglos y no querían ser limitados por ninguna ley porque, según ellos, habían sido elegidos por el mismo Dios para dirigir la vida de sus naciones y lograr la paz y estabilidad del continente.
Además, para evitar guerras entre sí, los países decidieron que se reunirían cada cierto tiempo en congresos donde resolverían las diferencias mediante el diálogo, en lugar de llegar a la lucha armada. También acordaron que ante cualquier desorden político o social que ocurriera contra el rey de un país europeo, los demás podrían intervenir para detener a tiempo una revuelta que pudiera volver a poner a todos los reyes en peligro.
A pesar de los acuerdos a los que llegaron las potencias, las ideas revolucionarias que se habían encendido en Francia no pudieron ser contenidas. La Santa Alianza y los demás tratados de la Restauración fueron inútiles intentos por detener la marcha de la historia.
GLOSARIO
- Congreso
- Reunión entre varias personas con el objetivo de discutir o resolver un tema previamente definido.
- Legítimo
- Que es auténtico y verdadero.